El rol del Consultor en las organizaciones

El rol del consultor está determinado por las expectativas de la organización o cliente que lo contrata, por lo que es importante conocer en profundidad sus necesidades y ajustar las expectativas. Las tareas del consultor pueden evolucionar durante el proceso, y su objetivo es mejorar la capacidad de las organizaciones para adaptarse a los cambios. Tom Lambert (1997) clasificó las tareas del consultor según el nivel de dirección que ejerce:

  • Defensor y abogado de acciones. En el caso del consultor defensor y abogado de acciones, su papel es detectar rápidamente las necesidades de la organización y proponer soluciones factibles y efectivas. Esto puede requerir una capacidad de síntesis y análisis de la información, así como una habilidad para la toma de decisiones y la implementación de cambios rápidos.
  • Experto en un área. El experto en un área, en cambio, aporta un conocimiento especializado en un tema específico, como puede ser la tecnología, el marketing o las finanzas. Su papel es ofrecer una solución concreta a una situación específica, basada en su experiencia y conocimientos. Puede ser importante que este tipo de consultor tenga habilidades de comunicación efectiva y una buena capacidad para presentar y justificar sus soluciones.
  • Desarrollador de habilidades. El consultor desarrollador de habilidades, por otro lado, se enfoca en ayudar a la organización a desarrollar las habilidades y capacidades necesarias para enfrentar cambios y desafíos futuros. Esto puede requerir habilidades de formación y entrenamiento, así como una capacidad para motivar y generar confianza en los miembros de la organización.
  • Colaborador en la solución de problemas. El consultor colaborador en la solución de problemas actúa como un asesor en la toma de decisiones, aportando conocimientos y experiencias que han funcionado en situaciones similares. Su papel es ofrecer una visión objetiva y aportar ideas frescas y creativas. Es importante que este tipo de consultor tenga habilidades de escucha y empatía, así como una buena capacidad para trabajar en equipo.
  • Identificador de alternativas. El consultor identificador de alternativas busca ofrecer una variedad de soluciones para una situación determinada, incluyendo sus riesgos y consecuencias. Este papel puede requerir habilidades de análisis y síntesis, así como una capacidad para trabajar en situaciones de incertidumbre y complejidad.
  • Descubridor de hechos. El consultor descubridor de hechos se enfoca en encontrar información relevante dentro y fuera de la organización, lo que puede requerir habilidades de investigación y análisis de datos. Es importante que este tipo de consultor tenga una capacidad para observar la situación con objetividad y sin prejuicios, y que pueda comunicar sus hallazgos de forma clara y efectiva.

El consultor tiene una función de ayuda para mejorar la situación de una organización, pero no es responsable de la ejecución. Los consultores tienen distintas teorías y modelos mentales para intervenir en las organizaciones, desde una visión de la organización como una máquina hasta una concepción de la actividad política y la cultura. El consultor y el cliente deben llegar a un entendimiento compartiendo el significado sobre la organización, el sistema humano y el cambio organizacional.

En resumen, cada tarea del consultor puede requerir habilidades y enfoques diferentes, pero en general, el consultor debe ser capaz de adaptarse a las necesidades del cliente, establecer una relación de confianza y trabajar en equipo para mejorar la capacidad de la organización para adaptarse a los cambios.

Referencias

  • Palací Descals, Francisco José ., and Miguel . Bernabé Castaño. Consultoría Organizacional. Madrid: Sanz Y Torres : Universidad Nacional De Educación a Distancia, 2013. 
  • ChatGPT

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