El desarrollo de un test psicométrico es una tarea intrincada, que exige meticulosidad y rigor. Aunque la creación de un instrumento de alta calidad implica adherirse a protocolos específicos, existe una diversidad de opiniones entre los expertos respecto a la cantidad y naturaleza de los pasos necesarios en este proceso.
Downing (2006) y Lane, Raymond y Haladyna (2016) apuntan a un procedimiento de doce etapas, en contraste, Muñiz y Fonseca-Pedrero (2019) identifican diez fases cruciales para desarrollar y validar un test psicométrico. Según la perspectiva de estos últimos, los pasos son:
- Establecimiento del marco general.
- Definición de la variable medida.
- Especificaciones.
- Construcción de los ítems.
- Edición.
- Estudio piloto.
- Selección de otros instrumentos de medida.
- Aplicación del test.
- Evaluación de propiedades psicométricas.
- Desarrollo de la versión final del test.
A pesar de las variaciones en los enfoques, la necesidad de un marco estructurado es unánime, crucial para asegurar la validez, fiabilidad y aplicabilidad del instrumento. En esta línea, proponemos una estructura de ocho pasos, que aunque simplificada, se alinea con las recomendaciones más recientes de la American Educational Research Association (AERA), la American Psychological Association (APA) y el National Council on Measurement in Education (NCME) (2014).
Este procedimiento octagonal abarca desde la conceptualización inicial, la creación y revisión de ítems, hasta la validación y revisión final, asegurando que cada test psicométrico sea un instrumento preciso, confiable y éticamente sonoro para medir variables psicológicas específicas. El objetivo primordial es que cada test, independientemente del número de pasos seguidos en su construcción, sea un reflejo fidedigno de la rigurosidad, la integridad y la excelencia en la evaluación psicométrica.
Justificación teórica y definición
El proceso inicial en la elaboración de un test psicométrico requiere una clarificación detallada del propósito detrás de su creación. Es fundamental comprender no solo lo que se busca medir, sino también a quién se pretende evaluar y con qué finalidad. En este marco, se pueden identificar tres consideraciones esenciales:
a) Definición del Constructo a Medir: En la psicología, muchas veces nos enfrentamos al desafío de evaluar constructos abstractos, es decir, variables que no se pueden observar directamente, como la inteligencia, la atención o la ansiedad. Sin embargo, estos constructos se manifiestan a través de comportamientos específicos que sí pueden ser observados y medidos. Por ejemplo, si bien no podemos medir directamente el constructo de «memoria», podemos evaluar la capacidad de un individuo para recordar una serie de elementos después de un período de estudio. Estos comportamientos, que sirven como indicadores del constructo, deben ser consistentes en diferentes situaciones y momentos. Los ítems del test deben estar diseñados para capturar y reflejar estos comportamientos indicativos.
b) Determinación de la Población Objetivo: Es vital establecer claramente a quién está destinado el test. ¿Es para niños, adolescentes, adultos o ancianos? ¿Está diseñado para personas con un cierto nivel educativo o cultural? Identificar las características demográficas y psicosociales de la población objetivo asegura que el test sea relevante y apropiado para quienes está diseñado.
c) Propósito del Test: Es esencial determinar la finalidad principal del test. ¿Se busca evaluar el nivel de habilidad o conocimiento de un individuo en un área específica? ¿O es para diagnosticar algún trastorno o condición particular? Otros usos comunes incluyen la selección de candidatos para un puesto o programa, la asignación de individuos a categorías específicas, la orientación vocacional o académica, o la detección temprana de condiciones o trastornos (screening). Conocer la finalidad del test ayuda a garantizar que se diseñe de manera que proporcione información relevante y útil para la toma de decisiones.
En conjunto, estas consideraciones iniciales son fundamentales para garantizar que el test sea válido, confiable y útil para los propósitos previstos. Se busca asegurar que el instrumento mida con precisión lo que se pretende medir, sea aplicable a la población adecuada y proporcione información valiosa para las decisiones basadas en los resultados del test.
Definición operativa de la variable o constructo que se quiere medir
La conversión de un constructo abstracto a un término operativo es un paso crítico en el desarrollo de un test psicométrico. Es esencial poder medir empíricamente lo que, en un inicio, es una idea conceptual. El proceso implica una serie de etapas cuidadosamente planificadas para garantizar que el constructo sea evaluado con precisión y validez.
Pasos para Definir Operativamente un Constructo:
- Revisión de la Literatura:
- Objetivo: Obtener una comprensión profunda y comprensiva del constructo.
- Proceso: Analizar estudios previos, teorías existentes y otros recursos académicos relevantes.
- Resultado: Identificación de las definiciones existentes, dimensiones y aspectos asociados del constructo.
- Delimitación del Constructo:
- Objetivo: Refinar y especificar claramente lo que se va a medir.
- Proceso: Identificar y describir las dimensiones clave y los aspectos del constructo.
- Resultado: Un constructo bien definido, con sus componentes claramente delineados.
- Identificación de Comportamientos Indicadores:
- Objetivo: Seleccionar los comportamientos observables que representan el constructo.
- Proceso: Usar métodos como el análisis de contenido, la observación directa o el juicio de expertos.
- Resultado: Una lista de comportamientos específicos que son indicativos del constructo.
- Definición Operativa:
- Objetivo: Convertir la definición conceptual en una definición mensurable.
- Proceso: Crear tareas, preguntas o situaciones específicas que permitan la observación y medición del constructo.
- Resultado: Una definición que facilita la medición empírica y la evaluación.
Ejemplo: Creatividad
- Definición Conceptual: Capacidad de generar ideas únicas y originales.
- Definición Operativa: La cantidad y originalidad de las respuestas dadas a la tarea de listar diez usos alternativos para un objeto común, como un clip.
Estrategias Utilizadas:
- Análisis de Contenido: Examinar documentos, registros y otros materiales escritos para identificar comportamientos y características asociadas con la creatividad.
- Observación Directa: Observar a individuos en situaciones específicas para identificar comportamientos indicativos de creatividad.
- Juicio de Expertos: Consultar a expertos en el campo para identificar comportamientos y características asociados con la creatividad.
- Incidentes Críticos: Identificar eventos o situaciones donde la creatividad fue claramente demostrada para entender sus manifestaciones.
En resumen, la definición operativa de un constructo es crucial para garantizar que sea medible y evaluable de manera empírica. Permite la transición de una idea abstracta a un fenómeno observable y mensurable, facilitando así la creación de herramientas de evaluación efectivas y confiables.
Requerimientos para la aplicación del instrumento de medida
El proceso de desarrollar un test, especialmente uno de naturaleza psicométrica, es meticuloso y requiere atención a diversos aspectos para garantizar que sea válido, confiable y útil para su propósito específico. Algunas de las consideraciones primordiales al desarrollar y aplicar un instrumento de medición incluyen:
Requerimientos para la Aplicación del Instrumento:
- Restricciones Temporales:
- ¿Cuánto tiempo se necesita para completar el test?
- ¿Se necesita un tiempo fijo o puede variar según el participante?
- Modalidad de Aplicación:
- ¿Se administrará el test de forma individual o en grupo?
- ¿Será administrado por un profesional o será autoaplicado?
- Soporte de Administración:
- ¿El test se administrará en papel y lápiz o en formato digital?
- Si es digital, ¿se necesita un dispositivo específico o software especializado?
- Ubicación y Contexto:
- ¿El test se realizará en un ambiente controlado como un laboratorio o en un entorno más abierto?
- ¿Es necesario un ambiente silencioso o se pueden tolerar algunas distracciones?
- Requerimientos del Participante:
- ¿El test tiene restricciones de edad, capacidad cognitiva o nivel educativo?
- ¿Es necesario adaptar el test para participantes con discapacidades o necesidades específicas?
Características de los Ítems:
- Tipo y Formato:
- ¿Serán preguntas de opción múltiple, verdadero/falso, escala Likert, respuesta abierta?
- Número de Ítems:
- ¿Cuántas preguntas se incluirán en total?
- Longitud:
- ¿Cuánto texto contendrá cada ítem? ¿Serán preguntas cortas o escenarios extensos?
- Contenido:
- ¿Qué áreas del constructo medirán los ítems?
- Orden:
- ¿Se presentarán en un orden específico o al azar?
- Formato de Respuesta:
- ¿Cómo responderán los participantes a cada ítem?
El diseño y desarrollo de un test son tareas adaptativas. Aunque existen prácticas y directrices recomendadas en la literatura, como las señaladas por Muñiz y Fonseca-Pedrero (2008), las decisiones específicas dependerán del propósito del test, las características de la población objetivo y el contexto en el que se planea utilizar el instrumento.
Construcción y evaluación cualitativa de los ítems
La construcción y evaluación cualitativa de los ítems en un instrumento de evaluación es una etapa crucial en el desarrollo de pruebas psicométricas. Los ítems deben ser diseñados para capturar con precisión el constructo que se pretende medir.
La calidad de los ítems es esencial. Si un ítem es ambiguo o mal formulado, puede sesgar los resultados, afectar la validez del test y, en última instancia, llevar a interpretaciones erróneas. Por tanto, una construcción detallada y reflexiva es esencial para garantizar que el instrumento de medida sea válido y confiable.
Principios para la Construcción de Ítems:
- Representatividad: Los ítems deben ser una muestra representativa del dominio completo del constructo que se está midiendo.
- Relevancia: Cada ítem debe ser pertinente y significativo en relación con el constructo.
- Diversidad: Debe evitarse la monotonía en la presentación de los ítems.
- Claridad: Los ítems deben ser claros y directos, evitando ambigüedades.
- Sencillez: Se debe utilizar un lenguaje sencillo y directo, evitando jergas o terminologías complejas.
- Comprensibilidad: Los ítems deben ser fácilmente entendidos por la población objetivo.
Consideraciones Adicionales:
- Formato de Respuesta: Escoger el tipo de respuesta (p.ej., elección múltiple, escala Likert) que mejor capture el constructo.
- Evitar Redundancia: Aunque algunos ítems pueden medir aspectos similares, es crucial evitar la repetición innecesaria.
- Ítems Positivos y Negativos: Intercalar estos ítems puede ayudar a reducir los sesgos de respuesta.
Adaptación de Ítems en Diferentes Idiomas: Al adaptar un instrumento a un nuevo idioma o cultura, es esencial garantizar que los ítems conserven su significado original y sean culturalmente apropiados. Las estrategias de traducción hacia delante y hacia atrás, como sugieren Hambleton (1996) y Muñiz y Hambleton (1996), pueden ayudar a lograr este equilibrio entre exactitud y relevancia cultural.
En resumen, la calidad y precisión de los ítems son fundamentales para la validez y fiabilidad de cualquier instrumento de medida. El proceso de diseño y evaluación de ítems es tanto un arte como una ciencia, y requiere tanto de habilidades analíticas como de sensibilidad hacia la población objetivo y el constructo que se mide.
Estudio piloto cualitativo y cuantitativo
La fase del estudio piloto en el desarrollo de un instrumento de medida es crucial para identificar posibles problemas en el diseño, formato o contenido del instrumento antes de su aplicación en una muestra más grande o en el estudio principal. Esta fase permite realizar ajustes necesarios y mejorar la calidad del instrumento.
Estudio Piloto Cualitativo: La perspectiva cualitativa en un estudio piloto se centra en obtener retroalimentación detallada sobre la experiencia de los participantes al completar el instrumento.
- Ítems problemáticos: Pueden ser aquellos ítems que los participantes encuentran confusos o ambiguos.
- Comprensión de las instrucciones: Es esencial que las instrucciones sean claras y fáciles de seguir para todos los participantes.
- Formato del instrumento: Problemas con el diseño visual, la disposición de los ítems o la facilidad de marcar respuestas.
- Errores semánticos: Palabras o frases que pueden ser malinterpretadas o que no se entienden claramente.
- Feedback general: Cualquier otro comentario o sugerencia que los participantes puedan ofrecer para mejorar el instrumento.
Estudio Piloto Cuantitativo: El aspecto cuantitativo del estudio piloto se centra en analizar las respuestas de los participantes utilizando técnicas estadísticas para evaluar el funcionamiento de cada ítem.
- Media y Varianza de cada ítem: Estos valores proporcionan una idea de cómo se distribuyen las respuestas y si hay una variabilidad adecuada en las respuestas.
- Índice de dificultad: Indica qué proporción de participantes respondió correctamente a un ítem. Es relevante principalmente para ítems de elección múltiple.
- Índice de discriminación: Muestra cómo un ítem discrimina entre participantes que obtuvieron puntajes altos y bajos en la prueba.
- Homogeneidad de los ítems: Evalúa si los ítems miden de manera coherente el mismo constructo.
- Correlación ítem-prueba: Evalúa la relación entre el rendimiento de un ítem individual y el rendimiento total en el test.
- Cargas factoriales: En un análisis factorial, estas cargas pueden ayudar a determinar qué ítems se agrupan juntos, indicando subdimensiones dentro del constructo principal.
- Funcionamiento diferencial de los ítems (FDI): Evalúa si un ítem funciona de manera diferente para diferentes grupos, por ejemplo, según género o etnia.
Tras realizar el estudio piloto, es esencial revisar y modificar el instrumento según sea necesario, basándose en los hallazgos cualitativos y cuantitativos. Esta revisión ayuda a garantizar que el instrumento final sea válido, confiable y adecuado para su propósito.
Selección de otros instrumentos de medida convergentes
La selección de otros instrumentos de medida convergentes es esencial para establecer la validez convergente de un nuevo test o instrumento. Esta validez se refiere a la medida en que las puntuaciones de un test están relacionadas con las puntuaciones de otros tests que miden constructos similares o relacionados. Al comparar las puntuaciones de un nuevo instrumento con las de instrumentos establecidos y validados previamente, se pueden obtener evidencias sólidas sobre si el nuevo test mide de manera adecuada el constructo de interés.
Aspectos a considerar al seleccionar instrumentos convergentes:
- Validación previa: Es esencial seleccionar instrumentos que ya hayan sido validados y que hayan demostrado propiedades psicométricas sólidas en investigaciones anteriores. Esto garantiza que las comparaciones realizadas son fiables y válidas.
- Relevancia del constructo: Los instrumentos seleccionados deben medir constructos que sean teóricamente relevantes y relacionados con el constructo del nuevo test. Esta relación teórica es crucial para establecer validez convergente.
- Facilidad de administración: Es práctico seleccionar instrumentos que sean fáciles de administrar, especialmente si se planea administrar varios instrumentos a la vez. Esto ayuda a reducir la fatiga y la carga para los participantes y facilita la recopilación de datos.
- Tiempo de administración: Considerar el tiempo total necesario para administrar todos los instrumentos seleccionados. Es aconsejable elegir instrumentos que no sean demasiado largos para evitar sobrecargar a los participantes.
- Coherencia sustantiva: Esta es la relación lógica y teórica entre los constructos medidos por los diferentes instrumentos. Se debe poder justificar teóricamente por qué se espera que los constructos estén relacionados y cómo se espera que se relacionen.
- Costo y accesibilidad: Algunos instrumentos pueden tener costos asociados o requerir licencias para su uso. Es esencial considerar estos factores prácticos al seleccionar instrumentos.
En resumen, al seleccionar otros instrumentos de medida convergentes, es vital garantizar que estos instrumentos sean relevantes, confiables y válidos. Estas comparaciones proporcionan una base sólida para evaluar la validez del nuevo instrumento y ayudan a asegurar que esté midiendo el constructo de interés de manera adecuada.
Estudio de campo y estimación de las propiedades métricas del instrumento
La fase de estudio de campo y la estimación de las propiedades métricas del instrumento es crítica en la construcción de un test psicométrico. Esta etapa asegura que el instrumento es confiable, válido y generalizable para su población objetivo. Los siguientes puntos resumen y expanden la importancia y los procedimientos involucrados en esta fase:
- Muestra Representativa: Una muestra adecuada es esencial para generalizar los resultados a la población más amplia. Una muestra representativa asegura que las características demográficas, socioeconómicas y otras variables relevantes de la muestra reflejan las de la población en su conjunto.
- Muestreo Probabilístico: Siempre se prefiere el muestreo probabilístico al no probabilístico, ya que permite hacer inferencias estadísticas más robustas sobre la población. Esto significa que cada miembro de la población tiene una probabilidad conocida de ser seleccionado.
- Tamaño de la Muestra: El tamaño de la muestra debe ser lo suficientemente grande para ofrecer una estimación precisa de las propiedades métricas del instrumento. Los requisitos del tamaño de la muestra pueden variar dependiendo de la técnica estadística utilizada.
- Fiabilidad: Es esencial evaluar la consistencia interna del test, lo que indica qué tan coherentes son las respuestas a diferentes ítems que miden el mismo constructo.
- Validez: Es el grado en que un test mide lo que pretende medir. Se debe evaluar la validez de constructo, criterio y contenido del instrumento.
- Estructura Interna: Es vital evaluar cómo se relacionan los ítems dentro del test, lo que puede hacerse a través de técnicas como el análisis factorial.
- Normas y Baremos: Las normas proporcionan un marco de referencia para interpretar las puntuaciones del test. Los baremos se utilizan para convertir las puntuaciones crudas en puntuaciones estandarizadas que permiten comparaciones más fáciles.
- Puntos de Corte: En los test referidos a criterio, los puntos de corte determinan los distintos niveles de rendimiento o competencia.
- Elección del Modelo Estadístico: Dependiendo de las características del test y del propósito de la evaluación, se elegirá entre la Teoría Clásica de Test (TCT) o la Teoría de Respuesta al Ítem (TRI).
- Análisis Estadístico: El tipo de análisis que se elija dependerá de varios factores, pero siempre debe ser el adecuado para responder a las preguntas de investigación y los objetivos del test.
Para garantizar que un test es de alta calidad y proporciona información válida y confiable, es esencial llevar a cabo un estudio de campo robusto y evaluar meticulosamente sus propiedades métricas. La calidad de un test se refleja en su capacidad para proporcionar medidas precisas y consistentes del constructo que se pretende evaluar.
Construcción del manual del test y sus revisiones
El manual de un test psicométrico es esencial para asegurar que se aplique y se interprete adecuadamente. Es el documento que guía a los profesionales en la administración, puntuación e interpretación de la prueba. Así, cualquier test destinado a la comercialización debe venir acompañado de un manual exhaustivo y detallado que contenga:
- Introducción y Ficha Técnica: Aquí se resumen los objetivos del test, lo que mide y se ofrece una breve introducción al constructo subyacente.
- Fundamentación Teórica: Es crucial entender el marco teórico en el que se basa el test para garantizar su validez conceptual.
- Características Estructurales: Describe cómo está organizado el test, sus diferentes secciones o componentes.
- Usos del Test: Define para qué situaciones o contextos está diseñado el test, ya sea para diagnóstico, selección, investigación, etc.
- Población Objetivo: Especifica a quién va dirigido el test: niños, adultos, profesionales de cierto sector, etc.
- Instrucciones de Aplicación: Proporciona instrucciones detalladas sobre cómo administrar el test y sus posibles subtests, garantizando que se aplique de manera uniforme en todas las ocasiones.
- Proceso de Baremación o Estandarización: Describe cómo se desarrollaron y validaron las normas o escalas de puntuación.
- Normas de Interpretación: Ofrece guías sobre cómo interpretar las puntuaciones, ayudando a los profesionales a entender lo que significa un puntaje en particular.
- Propiedades Psicométricas: Presenta información sobre la confiabilidad y validez del test, fundamentales para determinar su utilidad y precisión.
- Tablas de Normas o Baremos: Proporciona las escalas de puntuación, permitiendo convertir las puntuaciones crudas en puntuaciones estandarizadas.
El mundo científico y las sociedades cambian, lo que implica que nuestros tests y herramientas de evaluación también deben hacerlo. Por ello, es vital que, con el tiempo, se revisen y actualicen tanto el test como su manual. Esta actualización puede responder a nuevos descubrimientos científicos, cambios en las normativas o simplemente adaptaciones culturales y lingüísticas que reflejen con precisión la población actual. Además, los baremos y normativas pueden requerir ajustes conforme se obtengan más datos o la población cambie en sus características demográficas o culturales. Así, la revisión periódica asegura que el test sigue siendo válido, confiable y relevante en el contexto actual.
Referencias
- Moreno Rosset and Ramírez Uclés (2019) Evaluación psicológica : proceso, técnicas y aplicaciones en áreas y contextos. Madrid: Sanz y Torres.