La Teoría de la Relevancia fue desarrollada por Dan Sperber y Deirdre Wilson a lo largo de varios años. Los primeros trabajos fundamentales sobre esta teoría se publicaron en 1986, con el artículo titulado «Relevance: Communication and Cognition» (Relevancia: Comunicación y Cognición), escrito por Sperber y Wilson. Posteriormente, en 1995, Sperber y Wilson publicaron el libro «Relevance: Communication and Cognition» donde presentaron una versión más completa y elaborada de la teoría.
A lo largo de los años, tanto Sperber como Wilson y otros investigadores han continuado desarrollando y refinando la Teoría de la Relevancia, y se han realizado numerosos estudios y aplicaciones en distintos campos relacionados con la comunicación, la psicología cognitiva y la lingüística pragmática. Es importante mencionar que los trabajos posteriores de Sperber y Wilson, así como las investigaciones de otros académicos, han ampliado y enriquecido la teoría original, proporcionando nuevos enfoques y perspectivas en relación con la relevancia y la comunicación.
Según la Teoría de la Relevancia, los seres humanos tienen una tendencia cognitiva innata hacia la economía mental, es decir, buscan minimizar el esfuerzo cognitivo necesario para procesar la información. En este sentido, la relevancia es el criterio que guía nuestra selección y procesamiento de la información, ya que nos centramos en aquella que consideramos más relevante en un determinado contexto.
La teoría sostiene que la relevancia se deriva de la interacción entre un estímulo y el conocimiento y las expectativas previas del receptor. Para que la comunicación sea relevante, debe cumplir dos condiciones:
- Optimidad: La comunicación debe ser lo suficientemente informativa para satisfacer las necesidades cognitivas del receptor, pero sin ser excesivamente detallada o redundante.
- Efecto cognitivo positivo: La comunicación debe generar un efecto cognitivo positivo, es decir, debe aportar nueva información o actualizar el conocimiento existente de manera significativa y coherente.
La Teoría de la Relevancia también destaca la importancia del contexto en la comunicación. El contexto proporciona pistas y expectativas adicionales que ayudan a determinar la relevancia de la información. Además, la teoría enfatiza la importancia de la inferencia como un proceso fundamental en la comunicación, ya que el receptor debe realizar inferencias para llenar las lagunas de información y comprender el significado completo del mensaje.
Supongamos que estás en una conversación con un amigo y le preguntas: «¿Has visto mi nuevo teléfono?». A continuación, tu amigo responde: «He oído que es muy caro».
Desde la perspectiva de la Teoría de la Relevancia, se considera que el proceso de comunicación es guiado por el principio de relevancia. Según este principio, los individuos tienden a buscar la información más relevante y a interpretarla de la manera más efectiva posible. En este ejemplo, la relevancia se establece en base a la expectativa de que la respuesta de tu amigo sea informativa y relacionada con la pregunta que hiciste.
En este caso, la respuesta de tu amigo puede interpretarse de la siguiente manera: al decir que ha oído que el teléfono es muy caro, está proporcionando una respuesta indirecta que implica que no ha visto tu nuevo teléfono. La relevancia de esta respuesta se basa en la inferencia de que el precio del teléfono es un aspecto importante y que su respuesta puede tener implicaciones sobre si ha tenido acceso visual al mismo.
La Teoría de la Relevancia sostiene que los individuos buscan la interpretación más relevante y económica en términos cognitivos. En este ejemplo, la respuesta indirecta de tu amigo permite una interpretación más rápida y eficiente al proporcionar información relevante sobre el acceso visual al teléfono y su precio, sin necesidad de una respuesta explícita.
En resumen, la Teoría de la Relevancia sugiere que los individuos seleccionan y procesan la información relevante de manera eficiente para lograr una comunicación efectiva. En el ejemplo mencionado, la respuesta indirecta de tu amigo se considera relevante porque proporciona información relacionada con tu pregunta de una manera económica y eficaz.
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