INTRODUCCIÓN
Schaie (1996). Distingue entre los mecanismos de la cognición y los resultados de la cognición. Por un lado las transformaciones que se producen en algunos mecanismos básicos del procesamiento de información como la velocidad de procesamiento, la memoria operativa, la inhibición y la memoria a largo-plazo; mientras que, por otro lado, el desarrollo de la inteligencia, entendida ésta como producto y resultado de la aplicación de los mecanismos cognitivos en la resolución de diversas tareas. |
En España, la esperanza media de vida en 1900 era de 34,8 años y en la actualidad supera los 80; la proporción de personas mayores de 65 años para el año 2025 se espera que sea cercano al 22%.
Podemos fijar el comienzo de la edad adulta en los 25-30 años y su final alrededor de los 65 años, momento a partir del cual hablaríamos de vejez o ancianidad. Una joven de 25 años con trabajo, independiente económicamente de sus padres y que vive en pareja, es claramente una persona adulta; mientras que un joven de 30 años, sin trabajo ni independencia económica, que vive con sus padres, tiene un perfil más de joven que de adulto. De la misma manera, el adelanto de la jubilación o los problemas de salud pueden hacer que un adulto entre los 60 y los 70 años pueda ser considerado como un anciano o no.
Durante la vida adulta la similitud, la constancia en las conductas de los individuos disminuye debido a que la variabilidad socio-personal se incrementa en forma notable (diferencias individuales) y los cambios físicos y cerebrales, aunque existentes, como veremos, son menos generales, se dilatan en el tiempo y sólo se muestran en forma clara al acercarnos a la senectud. En la vejez se incrementa de nuevo, en forma gradual, la similitud en la conducta individual debido a que los factores biológicos y sociales comunes aparecen de nuevo como crecientemente determinantes de la conducta individual.
PERSPECTIVAS TEÓRICAS
¿Existe desarrollo en la edad adulta y durante el envejecimiento?
Piaget (1964). Las funciones superiores de la inteligencia y la afectividad tienden hacia un «equilibrio móvil», tanto más estable cuanto más móvil es, de tal forma que, para los «espíritus sanos», el final del crecimiento no indica, en absoluto el inicio de la decadencia, sino que autoriza un progreso espiritual que no tiene nada de contradictorio con el equilibrio interno. |
García Madruga (1991). La psicología evolutiva o del desarrollo se ha constituido como disciplina psicológica a partir del estudio de la infancia y la adolescencia, no sólo por el interés que tienen en sí mismas, sino como etapas específicas que es necesario analizar para abordar el origen de las capacidades psicológicas generales del ser humano. Esta concepción de la psicología del desarrollo, que surge en el siglo XX y es compartida por sus representantes más notorios e ilustres, Piaget y Vygotski, ha sido muy fructífera ya que ha aportado una perspectiva genética, evolutiva, totalmente necesaria para el esclarecimiento de los diversos procesos psicológicos. |
Baltes (1997). Desde la perspectiva del ciclo vital el desarrollo es fruto de la interacción de factores biológicos y culturales cuya influencia cambia y se modifica con la edad. |
Baltes, Staudinger y Linderberger (1999). Las investigaciones realizadas sobre el pensamiento post-formal y dialéctico son escasas y los resultados, todavía magros, no parecen confirmar la existencia de estadios específicos. |
Baltes, Staudinger y Linderberger (1999). El desarrollo de la mente y la conducta tiene un carácter dinámico, multidimensional, multifuncional y no lineal; es decir, la psicología del ciclo vital adopta un enfoque contextual-dialéctico en el estudio del desarrollo. |
Alexander y Langer (1990); Corral (2002); Labouvie-Vief (1992); Pascual-Leone (1983). La idea piagetiana de que el estadio de las operaciones formales es el estadio final del desarrollo ha sido desafiada por diversos autores que han propuesto la existencia de operaciones y estadios post-formales y dialécticos del desarrollo intelectual que caracterizarían el pensamiento durante la edad adulta y la vejez. |
Para Piaget, los procesos psicológicos, una vez alcanzado su desarrollo característico con la llegada de la edad adulta, únicamente están afectados por los procesos de deterioro o involución propios del envejecimiento en sus etapas finales. La realidad es otra y la idea piagetiana de que el estadio de las operaciones formales es el estadio final del desarrollo ha sido desafiada por diversos autores que han propuesto la existencia de operaciones y estadios post-formales y dialécticos del desarrollo intelectual que caracterizarían el pensamiento durante la edad adulta y la vejez.
Mientras que el pensamiento formal surge, se desarrolla y se evalúa en el contexto escolar, a partir de situaciones y problemas bien definidos propios de la física o las matemáticas, el pensamiento post-formal surge, se desarrolla y se aplica en contextos más amplios y complejos de la vida adulta, en los que los problemas con frecuencia no están claramente definidos, existen diversos puntos de vista y los aspectos cognitivos y afectivos están estrechamente interrelacionados. El pensamiento post-formal permitirá ir más allá del carácter lógico y objetivo del pensamiento formal para incluir diversas perspectivas en una concepción más relativista del conocimiento que incluiría los aspectos subjetivos y personales, tratando de ampliar la lógica formal a través de la dialéctica. De esta manera, según estos autores este tipo de pensamiento post-formal sería capaz de admitir la existencia de contradicciones e incluso de integrarlas dialécticamente en una nueva estructura.
No parecen existir estadios en sentido estricto de operaciones post-formales o dialécticas, pero que sí existe un pensamiento más allá del pensamiento formal y este pensamiento no es algo que se da necesariamente en todos los adultos o los ancianos pero que sí puede darse, al menos, en algunos de ellos. La principal perspectiva teórica que ha abordado este asunto es la del ciclo vital que. La asunción básica de la psicología del ciclo vital es precisamente que el desarrollo no se completa al llegar la edad adulta, sino que continúa a lo largo de toda la vida, y que durante todo el ciclo vital están presentes cuatro procesos evolutivos básicos: adquisición, mantenimiento, transformación y desmoronamiento de las estructuras y funciones psicológicas. Desde la perspectiva del ciclo vital el desarrollo es fruto de la interacción de factores biológicos y culturales cuya influencia cambia y se modifica con la edad.
En opinión de los psicólogos del ciclo vital el desarrollo de la mente y la conducta tiene un carácter dinámico, multidimensional, multifuncional y no lineal; es decir, la psicología del ciclo vital adopta un enfoque contextual-dialéctico en el estudio del desarrollo. Además de los patrones de cambio con la edad y direccionalidad que muestran los factores biológicos y culturales que acabamos de describir, según el enfoque del ciclo vital, el desarrollo ontogenético es considerado como un proceso de adaptación con tres propósitos centrales: crecimiento, mantenimiento y regulación de las pérdidas, en las diversas funciones y procesos psicológicos. Durante el desarrollo del individuo la asignación de los recursos psicológicos a estos tres procesos adaptativos muestra también un patrón evolutivo diferencial. Mientras que la asignación de recursos al crecimiento de los diferentes procesos y funciones psicológicas tiene su especial relevancia durante la infancia y la adolescencia y disminuye con la edad, los recursos psicológicos que el individuo debe asignar al mantenimiento de los procesos psicológicos y la regulación de las pérdidas en las diversas funciones se incrementan con el paso del tiempo.
¿Existen estadios en el desarrollo cognitivo durante la edad adulta y durante el envejecimiento?
Schaie y Willis (2002). Para estos autores la teoría de estadios de Piaget está centrada en los procesos de adquisición de conocimientos, lo que hace imposible que se consideren etapas o estadios posteriores al pensamiento formal ya que no parece posible superar a este respecto los métodos y estrategias de la ciencia que se ponen de manifiesto en el pensamiento formal. Por el contrario, el modelo de estadios del desarrollo cognitivo de estos autores pone el acento en otros usos y propósitos de la actividad intelectual. |
Schaie y Willis (2002). Algunos individuos que en la madurez tienen responsabilidades especialmente complejas, se enfrentan a la dirección de organizaciones jerarquizadas en las que la toma de decisiones es singularmente importante. Lo llaman estadio ejecutivo. |
Parece claro que existe un pensamiento adulto que ha sido caracterizado como post-formal y que este pensamiento continúa en la vejez, pero no se puede hablar, al menos en términos piagetianos, de un estadio post-formal. La psicología del ciclo vital nos confirma la existencia de desarrollo durante la edad adulta y el envejecimiento pero, como consecuencia de su perspectiva dinámica, multidimensional y multifuncional del desarrollo, rechaza una concepción de estadios del desarrollo como la que se propone desde los enfoques de origen piagetiano.
Schaie y Willis (2002), han propuesto una teoría de estadios en el desarrollo cognitivo adulto. El modelo de estadios del desarrollo cognitivo de estos autores pone el acento en otros usos y propósitos de la actividad intelectual.
Quizás sea el pensamiento post-formal el único tipo de pensamiento característico de la edad adulta y la vejez, «cualitativamente» diferente del pensamiento durante la infancia y la adolescencia. En cualquier caso, dejando ya el problema de los estadios, lo que sin duda existe durante la edad adulta y la vejez son numerosos y crecientes cambios cuantitativos en la cognición.
REFERENCIAS
- García Madruga, Delval, & Delval, Juan. (2019). Psicologia del desarrollo I (2ª ed. rev. ed., Grado (UNED); 6201201). Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia.