Herencia monogénica. Los rasgos de un organismo pueden estar determinados por un único gen, como es el caso del color de la flor del guisante o del albinismo.
Herencia poligénica. Los rasgos de un organismo pueden estar determinados por varios genes como ocurre con la altura de una persona o su inteligencia.
Por cuestiones obvias no es posible experimentar con seres humanos, la alternativa es el estudio del patrón de transmisión del carácter. Dicho patrón se establece a través de la información recogida de la familia en la que se detecta el carácter de interés. Esta información se suele resumir representándola en forma de lo que se denomina una genealogía o pedigrí.
Los patrones de transmisión de un carácter mendeliano, detectados a través de las genealogías, dependen
de dos factores:
- El tipo de cromosoma donde se halla el gen implicado. La localización puede ser:
- Autosómica, cuando el locus se halla en un autosoma (denominación que se da a cualquiera de los cromosomas que no sean los sexuales),
- ligada a los cromosomas sexuales.
- El tipo de expresión fenotípica de las variantes alélicas del gen, ésta puede ser diversa, pero en la mayoría de casos es dominante o recesiva
Por tanto, según estos criterios, se establecen tres tipos de patrones de transmisión en la herencia monogénica: autosómica dominante, autosómica recesiva y ligada al sexo.
REFERENCIAS
- Abril Alonso, A. (2016). Fundamentos de psicobiología (UNED (Sanz yTorres). Alcorcón (Madrid): Sanz y Torres.
- Powerpoint María Penado
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